miércoles, 29 de mayo de 2013
COLEGIO NUESTRA SEÑORA DE LAS MERCEDES
MEGA-COLEGIO LOS ARAUJOS
MONTERÍA -CÓRDOBA
CUANDO BERNARDA MURIÓ
Sonaban las campanas de la iglesia,
al son de una canción.
Los de afuera decían Santa,
los de adentro María Bernarda.
Cuando suenen las campanas de la iglesia,
no pregunten quien murió.
Fue Santa María Bernarda,
que siempre nos protegió.
Las nubes son blancas,
el sol es amarillo.
Y el corazón de Santa María Bernarda,
ilumina siempre nuestro camino.
Astrid Sofía Pestana Polo 8-02.
SANTA MARÍA BERNARDA
Eres una estrella
que me guía hacia
la paz,
eres tan bella y santa.
Misericordia tu mirada,
Nos llena de amor y de paz.
Gracias por tu amor,
gracias por tu luz.
Le pedimos a Dios,
que te guarde en su corazón.
Gracias Santa María Bernarda,
por tu amor y bondad,
porque eres grande y real.
SANTA, POR SIEMPRE TE
VOY A QUERER
Muy amada y bien querida por todos,
en nuestros corazones siempre estarás.
Tú solamente lo sabrás,
lo mucho que te respetamos todos.
María Bütler, con tu esfuerzo y valentía,
nos ayudas a vivir cada día.
Nos brindas cariño,
eso me inspira a
llenarme de valor.
Cuando pienso en ti,
no solo se me viene a la mente religión,
sino todo lo has hecho en más de un corazón.
Pidiendo a Dios sabiduría y entendimiento,
Para vivir en este mundo lleno de lamentos.
Nos dejaste tu legado “ayudar al más necesitado”,
por eso te brindo este poema,
que me salió del alma y el corazón.
Juan Camilo Pico Caraballo 11-01
POEMA A SANTA MARÍA BERNARDA
Hermana Gladis Estela Llano Uribe
La Madre María Bernarda un día decidió
Partir a las misiones como misionera de Dios
Para anunciar el Evangelio con mística y con
amor.
Su vida fue testimonio de misericordia y
profundo amor
La oración fue su herramienta para construir un mundo mejor
En América Latina, Colombia y Ecuador, la acogieron con alegría
Por ser enviada de Dios.
Abrazó a los pobres como regalo de Dios
Anunció la misericordia con alma y con
corazón,
Enseñó a sus hermanas a tener entrañas
de misericordia Y mucha compasión.
Frente a los enfermos y a los pobres, siempre nos exhortó
A ser misioneras con ardor frente a la
humanidad
que tiene hambre de Dios.
Decía a sus hermanas: “Predicar el Evangelio
es mi obligación”
“soy y debo ser misionera” lema que vivió con
ardor y
No ahorró sacrificio alguno, para ganar almas
para Dios
Fue mensajera de Paz y Bien y hasta los
cielos llegó
Una Santa Misionera con coraje y con tesón
Es Santa María Bernarda que a María
Auxiliadora nos dio
Como Madre y
protectora de la Congregación.
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